Anecdotario
Más que una biografía se trata de anecdotario. Uno de esos que, siendo optimista, nos interesara solo a los tres que formamos la banda. Así que si alguien decide darse tiempo para leer algo: Gracias!
Es imposible para mí hablar de RESTOS sin hablar de REST IN PEACE, quizá para Efrén sean cosas diferentes (nunca lo he sabido), para mí, y creo que para Rafa también, se trata de una misma esencia, por lo tanto, de una misma banda.
Indudablemente debo recordar cómo fue que comencé a tocar la batería porque para mí todo ha sido un mismo proceso, una misma historia. Ahora que lo pienso me veo tocando la batería en el pasado. Aunque he seguido tocando, cuando dejé a RESTOS, dejé de “tocar la batería” (de acariciarla, de descubrirla).
Cuando estaba en la secundaria tenía un trío de amigos inseparables, Víctor (el Feno), Beto Luna (el Sonrics) y Alex (el Venada). Los menciono a los tres porque se me haría injusto solo recordar al que tiene que ver con ésta historia. La cuestión es que después de terminada la secundaria seguimos siendo amigos, muy amigos, los tres, pero cada quien hizo su vida. Ya nos veíamos muy esporádicamente.
De repente, después de muchos años El feno me platicó que tocaba la guitarra, yo sabía que su papá y todos sus tíos eran músicos, así que no me tomó de extraño, aunque sí me dio mucho gusto. Ahora recordé cuando nos metíamos en su cuarto y poníamos a Soda, Caifanes o The Cure en su cuarto y hacíamos como que tocábamos todos los instrumentos.
Precisamente por ese gusto que compartíamos por la música el Feno me invitó a su ensayo y yo iba súper emocionado, me imaginaba que uno de mis amigos, de mis mejores amigos, podía llegar a ser como una de esas bandas a las que admirábamos.
Llegamos al ensayo, en la casa de Memo, en la Olímpica y Revolución. El baterista nunca llegó y a mí me picaban las manos tocar la batería. Siempre había tocar una. Entonces Víctor me dijo, pues toca la batería, y yo, ooooorale. Recuerdo muy bien que tocamos Viento, de Caifanes. La sorpresa fue que al terminar la canción me dijo el bajista: ¿puedes venir a ensayar mañana?, creo que tocas mejor que nuestro baterista. Obviamente ninguno de los dos tocábamos nada, jajaja, pero creo que le caí mejor que el otro. Ahí comencé a tocar la batería. Así, por error, por casualidad, por amistad, por gusto.
Ese grupo tuvo dos nombres: Némesis y Stigmata. El segundo de los nombres por una canción de Bauhaus. La banda duró algunos meses y tocamos 3 veces. La primera de ellas en una plaza comercial (Plaza Rió Nilo) en Oct. o Nov. de 1993. Yo tenía 19 años y recién me había “casado”. En esa banda hice mis primeras 2 rolas: “Caín” y “Mutílame”.
Como no tenía batería, la banda duró hasta que nos pidieron la que usaba. La semilla estaba sembrada. Me fui a Tijuana a trabajar, con el único fin de comprarme mi batería. Cuando volví con ella, ya cada quien tenía su banda, menos Vélez, el vocalista.